La masacre se propinó en la fábrica de lacteos Cullen's ltda. Los bandidos ingresaron a ésta con el carnét de un empleado que acababan de asesinar afuera. Sus armas iban escondidas en un morral de cuero que portaba uno de ellos, un hombre blanco, pelo largo color café oscuro y alto. Su cara se mantenía tapada con una capucha de color negro, nisiquiera se podían ver sus ojos.
Todos tomaron una poscición específica y uno de ellos se dirigió a la oficina del gerente, en ésta se hallaba el Sr. Cullen tomando su café descafeinado matutino.
-Arriba los brazos y deje las manos dónde pueda verlas- gritó el ladrón ingresando a la oficina. El señor Cullen elevó sus manos asustado y sorprendido a la vez. El bandido sacó un arma bastánte grande del morral de cuero y le apuntó a la cabeza de la víctima.
-No me dispare...-dijo ésta casi sin aliento- porfavor.
-No lo haré si sigue mis órdenes al paso de la letra.
-Si, si lo haré. Péro, que quiere?
-Ya lo sabrá.- advirtió el bandido.
Éste sacó un walkietalkie de su chaqueta de cuero sintético y oprimió el botón izquierdo para hablar.
-Ya tengo al tipo, cumplieron con su párte?
-Lo estamos haciendo- contestó una voz de mujer al otro lado de la línea.
-Bien hecho, Jane.
-Gracias Aaro- el hombre cortó la comunicación y miró de nuevo al gerente, el cuál había tenído el arma de Aaro apuntando a su cabeza todo éste tiempo.
El tímbre para anúncios sonó.
-Queridos trabajadores, seré clara al hablarles- dijo la mujer que había estado hablando hace unos segundos con Aaro- lamentamos informarles que el Señor Cullen, su jefe, se encuentra secuestrado en su oficina, solo queremos que nos den la ubicación y clave de la caja fuerte, luego de llevarnos el dinero, todos ustedes quedarán en libertad, incluyendo al Señor Cullen. Por ahora, nadie podrá ni salir ni entrar de éstas instalaciónes antes de que nos marchemos.
Todos se hallaban con un alto ataque de nervios, solo el Señor Cullen, aún mantenía la compostura.
-Quieren la caja fuerte, eh?- preguntó éste.
-Si- contestó Aaro -lo acaba de oír fuerte y claro.
-Como saben mi apellido?
-Es obvio, investigaciónes. El internet es muy útil en éstos dias, querido Carlisle- observó el ladrón, su voz éra aguda, péro, punzante a la vez- Pero no hablemos más de éso, solo... solo digame dónde se encuentra la caja fuerte y digame la clave también; sacaré el dinero, me voy y me llevo a mis amigos, y lísto! Todos vivimos felices. Bueno, talvez unos pocos queden infelices... péro, igual, que mas da! No me interésa.
En el centro de la fábrica, se encontraban el resto de los malandros, ningúno traía capuchas en su rostro. Éran 3, la chica rubia, de pequeña estatura debía de ser Jane, ésta éra la única mujer en el grupo; El otro, éra un joven alto, de no mas de 23 años, su pelo lacio y oscuro caía como una cáscada sobre su rostro perfecto; por último, estaba un chico de cabello color cobre, alto y de tez blanca a igual que los demás.
-Alec, Demetri, vigilen esos 2 ángulos, yo cuidaré ésta párte- les dijo Jane señalando cáda uno de los lugares nombrados.
-Ok- contestó el chico de pelo lacio negro- ten mucho cuidado no hay que confiarnos de nadie.
- Descuida, Alec- dijo la chica, los despidió y ambos se alejaron colocándose sus capuchas oscuras.
En la oficina del señor Cullen las cosas no iban mejor, por el contrario, empeoraban.
-O, me da la clave y la cja, o se muere, al igual que todos sus empleaduchos- amenazó Aaro.
-Es usted un cobarde que se escónde tras pistolas y balas para obtener lo que desea- dijo Carlisle enfrentando a Aaro.
-Si- éste rió- Si!- gritó.
-Maldito haragán- murmuró Cullen.
-Sus palabras lo llevan a la horca poco a poco.
-A usted también- Carlisle fué abriendo un cajón a medida que la discusión iba aumentando su calentura, hásta que...
-Maldita bestia infernal- murmuró Aaro observándo al ver la pistola apuntandole a su cabeza, el Señor Cullen la sostenía sin miedo alguno.
-Creía que no me hallaba preparado para algo así, pués ahora conóce la respuésta.
-Es usted un idiota- susurró Aaro- Idiota!- exclamó apretando el gatillo de su arma d fuego.
Carlisle cayó al suelo, Aaro aplicó otro balazo al pecho, péro antes de dar el tercer disparo, Carlisle le disparó a su pierna, Aaro cayó y dió el tercer balazo, el cual penetró el corazón de su víctima.
En el walkietalkie sonaba la voz de Jane angustiada.
-Que sucede? Aaro? Escuché disparos- nadie contestó.
-Aaro? Los empleados se empiézan a preocupar... Aaro!- repitió la muchacha.
Jane corrió hacia la oficina, los otros dos muchachos tras de ella, abrió la puerta de una patada y se internó en la habitación.
-Oh, por Dios- dijo casi gritando- Aaro?- se agachó y tomó la mano de su compañero, éste se retorció en el suelo.
Alec y Demetri entraron y observaron la perturbadora escena que se mostraba ante ellos.
-No se queden ahí, ayudenme!- les ordenó Jane.
Los chicos tomaron al hombre y salieron casi arrastrandolo. El cuerpo del Señor Cullen quedó allí, paralizado, sin movimiento alguno que mostrara siquiera una señal de vida.
6 comentarios:
QUE PROLOGO TAN EMOCIONANTE, MUY PROMETEDOR, YA QUIERO EL SIGUIENTE CAPITULO POR FAVOR, SE VE MUY CHIDO
LUCY
SALUDOS DESDE MEXICO
dios me encanto y que prologo,felicidades sigue asi hermosa...Besos...
dios me encanto y que prologo,felicidades sigue asi hermosa...Besos...
Gracias, le estoy poniendo mi máximo empeño a mis escritos; el miercoles publicaré el primer capitulo. :D Las quiero mucho.
hayy si por fin un fanfic de rosalie y emmett , no te conozco, pero ya siento que te quiero kata , escribes un fanfics de mi pareja favorita de crepusculo, oh chica eres genial!!!!. este fanfic esta buenisismo, muero por leer el siguiente capitulo. quiero que ya aparezca mi ositoh emmy
Wiiii ;) que lindo, estrenando nueva historia. aunque Rosalie nunca ha sido santa de mi devoción esta historia, promete ser muy interesante. lo bueno es que Emmett es el protagonista y le pondrá un poco de diversión a la cosa. EMMETT Y SU SENTIDO DEL HUMOR JAJAJA...
MI VAMPIROZA SIGUE ASÍ, YA VES COMO TUS HISTORIAS SON INCREIBLES Y NO LO DIGO YO NADA MÁS POR SER TU AMIGA.
NOS LEEMOS PRONTO
koko
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