-Y, como lo piensas hacer?
-En la registraduría debe estar su ubicación- continué caminando aún mas esperanzada.
-Bella... Bella!- dijo agarrandome el brazo, me detuve y me giré para verlo.
-Para que quieres saber su ubicación? Recuerda el infierno que te hicieron vivir cuando pequeña- el recordar aquel tiempo de miseria en el que viví cuando niña me hizo entristecer, pero, luego una energía enfurecedora me hizo seguir caminando a paso aún mas firme.
-Solo quiero volver a verlos, quiero saber que fue de ellos y... porque nunca me buscaron...- Carlisle me habia contado que mis padres jamás se interesaron en encontrarme, ni un cartel, ni un anuncio policiaco se vió cuando desparecí.
-Bella... no vale la pena...
-Si, para mi si lo vale!- exclamé interrumpiendolo. Paré de andar y lo miré a los ojos -Que te pasa, Carlisle... pareciera como si no quisieras que los hallara.
-Esque no quiero que te hagan daño- noté tristeza en sus ojos color miel.
-Tranquilo, no lo harán... te lo prometo- dije mirandolo con dulzura. Mentirosa, ya callate estúpida conciencia.
Caminamos en silencio el resto del trayecto, a continuación, llegamos a la registraduría, ingresé con rapidez ordenandole antes a Carlisle que me esperara afuera.
-Buenos dias- dije saludando al celador.
-Buenos dias- me saludó él.
-Donde puedo averiguar datos familiares?
-Ahí- el hombre me señaló un lugar en específico, en el cual habian varios cubiculos atendidos por jovenes de mi edad, todos con un computador en su escritorio y un cliente frente a él. Me dirigí hacia aquel lugar.
Hice la fila impaciente, éra un infierno, por un momento creí que me quedaría dormida de tanto estar allí parada, me reí ante la suposicion de que el mísmo diablo se iria de allí aburrido; pero yo no podía hacerlo, si me iba, perdería toda oportunidad para encontrar a mis padres, si me iba, no volveria, mi fuerza de voluntad no lograria hacerme volver. Seguí avanzando poco a poco hasta que llegó mi turno, tome asiento en la silla como me lo indicó la señorita, ésta éra de pelo color rojizo y en su placa llevaba el nombre con apellido de Jessica Stanley.
-Buenos dias señorita.
-Buenos dias- la saludé.
-Quisiera saber sobre mis padres, no se nada de ellos hace mucho y tampoco sé su ubicación y quiero saberla- expliqué cada punto con una sonrisa dulce y amable.
-Muy bien...- oprimia cada tecla de su computador con rapidez -Cédula, por favor.
-No, no tengo...
-Disculpe, pero no la puedo ayudar sin una identificación.
-Por favor, ayudeme, sus nombres son...
-Lo lamento, no puedo ayudarla- me interrumpió.
Puse mi puño sobre el escritorio bruscamente, no entendía porque no habia sacado la cédula, oh, cierto, el muy bruto de mi padre, Carlisle, me dijo que no éra importante, que no servía para casi nada. Y ahora, no tenía nada, decidí irme de allí en lugar de seguir haciendo el ridículo, habia esperado casi una hora en esa fila del demonio para nada. Me sentia una perdedora, así, sonrojada y furiosa, me marché de allí.
-Que pasó?- me preguntó Carlisle preocupado al ver mi expresion triste y desilusionada.
-No tengo cédula.
-Agg... nunca creí que llegara a ser necesaria...
-Pues si lo es!- exclamé furiosa -Lo es! Y yo no la tengo, ahora esa... perra, no me quiere dar ninguna informacion sobre mis padres.
-Bella... calmate, no es para tanto- agregó mirandome con aburrimiento.
-Es muy importante para mi- le explique.
-Bueno, no te van a dar informacion sin cedula, no sería legal.
-Legal...- y el bombillito en mi cabeza se me prendió derepente -Claro! Hay otros modos de llegar a esa informacion... muchos de ellos no son legales.
-Bella tieness una gran mente criminal- sonrió malevolamente.
-Lo se- sonreí -tendremos que esperar hasta la noche.
-Ok.
Tomamos un taxi, no pensaba caminar hasta el departamento con lo fatigada que estaba luego de la caminata desde la casa de Edward hasta la registraduria, me dolian los pies y ya tenia algunas gotas de sudor en la frente y varias ampollas en mis pies, no pensaba ganarme mas.
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Le dí otro mordísco a mi pastelillo de canela y pasé el canal con el control remoto, mi programa favorito acababa de terminar. Miré la hora en mi celular, éran las 7:00, el tiempo si que vuela, pensé, luego me puse en pie y me dirigí al cuarto de Carlisle.
-Carl...- toque la puerta, pero antes de terminar, éste me interrumpio.
-Bella, esperame un momento, porfavor- dijo dentro de su habitación y sin abrir la puerta.
-Ok- accedí a su petición.
-Listo!- exclamó abriendo la puerta.
-Que estabas haciendo ahí?
-Vistiendome...
-Ahhh... Me parece excelente que ya estés listo, ahora yo me iré a duchar y a arreglar.
Me dirigí a la ducha y tomé un baño de agua helada, ya que no teniamos dinero para pagar un calentador; salí del baño y me dirigí a mi habitación para vestirme y arreglarme el maquillaje, escogí unos jeans negros, una blusa de tiras gruesas color rubí que dejaba una parte de mi espalda descubierta, una chaqueta de cuero negro y unos tennis de igual color.
Para el maquillaje, me apliqué lo usual, una capa de polvos numero dos, un rubor bien rosado, un poco de pestañina, labial color rojo palido, brillo sabor a cerezas y, por ultimo, un poco de sombras color rosa combinado con blanco.
-Lista?- me preguntó Carlisle al verme salir de mi habitación.
-Si.
Tomamos un taxi y llegamos a la registraduría, eran mas o menos las 7:30 p.m., la registraduría cerraba a las 8:00 p.m., faltaba poco para nustra "busqueda ilegal de datos".
La paciencia no me acompañaba, impaciencia era mi segundo nombre, por asi decirlo, en esos momentos, miré a Carlisle, éste no parecía muy emocionado ni muy seguro de lo que iba a hacer en las proximas horas, parecía como en un trance, en un estado de shock, su alma no estaba presente, hablando metafóricamente, estaba flotando en todo el mundo, menos aqui, donde deberia estar.
La hora de entrar en accion llegó, la registraduría cerró. Tuvimos que esperar otra hora mientras toda la gente (clientes y empleados) dejaban el lugar, no podíamos trabajar con tantas personas viendonos, obviamente no sería seguro ni para nosotros... ni para ellos, en toda mi carrera de atracadora, ladrona, etc., jamás tuve que matar a una persona, pero si se llegaba a presentar ese inconveniente, no dudaría en hacerlo, o eso creía.
-Es hora- le advertí a Carlisle.
Nos escurrimos por la parte trasera del establecimiento, yo entré por medio de una ventana abierta y Carlisle me siguió con suma tranquilidad. Entramos en una habitación llena toda con cajas, muebles, escritorios, papeles, carpetas, entre otras cosas que vimos con nuestras linternas, Carlisle llamo mi atencion con un bzzzz y me mando seguirlo en silencio, y asi lo hice, hasta llegar a un cuarto que, efectivamente era donde estaban ls oficinas de informacion familiar, lo supe por los letreros en cada cubiculo.
Tomé asiento en uno de los escritorios y prendí el computador, comencé a buscar en el sistema a mis padres, los promotores de todo esto, de mi intromision en este lugar con Carlisle; y los encontré: Charlie Swan y Renné Swan. Me dio por buscar mi nombre y... nada, ni una foto, nada sobre mi, esos malditos... Busqué su ubicación, y la encontré.
Anoté en un papel todos los datos y apagué el equipo preguntandome porque no salia ningun dato sobre mi. Carlisle y yo salimos rápidamente del edificio teniendo mucho cuidado para que no nos atraparan, éramos profesionales, pero si algo aprendí en todos mis años de experiencia, esque nunca debes fiarte de que tan bueno seas en algo, sobre todo si ese algo es robar.
-Ahora que?- me preguntó mi compañero mientras caminabamos por las heladas calles de Port Angeles.
-Ahora, hay que buscar estos dos...
-Estas loca- me interrumpió.
-Loca, yo? Por favor... solo un poco- me reí de mi "defensa" y luego Carlisle me acompañó.
La bocina de un auto al lado del andén por el que caminabamos, me hizo mirarlo. Éra un volvo plateado, ya sabía la cara con la que me encontraría, en esos momentos no quería verla, ya me estaba resultando aburrido y monótono verlo.
-Hola- nos saludó Edward bajando del auto y dandome un beso en la mejilla luego.
-Hola.
-Hola.
-Que hacen por aqui?- pregunto interesado.
-Nada...- comencé, luego Carlisle me interrumpió.
-En la registraduria.
-Haciendo que?
Miré a Carlisle con enojo, no tenía ganas de hablar sobre el tema y ahora él lo ponía como tema de conversación... con Edward!
-ESto irá para largo...- murmuré tan bajo que al parecer no pudieron escucharme, o si?
4 comentarios:
Holis amix
aawww que entradota mas padre
me gusto muxoooooooooo...!!
siempre tan finos tus post :O
jajajaja vale paso a millon es que
estan diciendo que se va a ir la luz y bueno
TT_TT xaauuu...!!
Me encanto y dios a buena hora y aparece Edward....Sigue asi cariño ....Besitos..
Gracias por comentar, uds son la razon por la cual escribo... y si, a buena hora llego Edward... Que pasará ahora? Sigan leyendo, un beso para tod@s :p
vengo a ponerme al corriente, raro q bella no quiera ver a edward es tan lindo haha... ahora voy a leer el sig cap!!!
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